domingo, 28 de noviembre de 2010

¿Te acuerdas de Alesana?



Yo sí.
Tenía manías, como todos, ¿no?. Ella se drogaba, e inventaba monólogos mientras preparaba el desayuno.
Creo que quiso ser actriz; antes de tener la manía de drogarse. La verdad es, que incluso algo colocada, actuaba bastante bien. A veces, demasiado.


"Venga, va, empieza contándole sus penas para acabar susurrándole cosas bonitas entre los piernas. Me pregunto a quién le contarás que no haces lo mismo conmigo.
...Tal vez sea a ella; y se quitó las bragas por llenarse de pena. Tal vez yo debería hacer lo mismo.... No, estoy demasiado enganchada a jugar, como si no me importase, y sabiendo que no me da igual. Ya sabes, para que la partida se prolongue sin victoria ni pérdida.
De todos modos, princesa, sólo me atrae la idea que he configurado de ti.
Sólo me gustas, me gustáis, a ratos. A ratos me soporto. Es una mera cuestión de probabilidad matemática que coincidamos.
No sé si lanzarme a tu bajo vientre es prostituir la idea que tengo de mí misma, o meramente cambiarla.
Tampoco debería importarme."



Luego, mientras fumaba sorbos de café, murmuraba entre dientes: "Déjame que por una vez no sea yo, déjame..."


Laura

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